Por SonoraStar
Cuando tienes una rutina, es más probable que parezca que tienes toda tu vida ordenada. Mantener rutinas diarias significa desarrollar tu pulcritud, madurez y organización personal. Pero hacer un horario puede llegar a parecer un poco difícil.
¿Por qué es importante la rutina? A nivel de salud mental, las rutinas pueden brindar una sensación de control y comodidad psicológica.
De hecho, un estudio de 2011 de la Universidad de Tel Aviv concluyó que una cantidad saludable de comportamientos repetitivos se relaciona con una menor prevalencia de ansiedad.
Una razón que podría explicar esto es que las rutinas eliminan la posible ‘fatiga’ de tomar decisiones todo el día, todos los días.
Entonces, ya sea que busques calma mental, una estructura útil o éxito profesional, saber cómo hacer una buena rutina diaria es el primer paso. A continuación se comparten cuatro pasos sencillos para crear un horario.
1. Identifica lo que más te importa y dale prioridad
Identifica lo que quieres lograr con tu horario. Crea una lista de lo que deseas incorporar a tu vida para que puedas encajarla en tu horario. Ser capaz de identificar tus objetivos diarios puede servirte de inspiración para alcanzarlos, y la inspiración puede impactar positivamente cada interacción y pensamiento.
2. Aborda un aspecto importante de tu rutina durante la primera hora
Dado que muchas personas son más productivas por la mañana, tiene mucho sentido colocar tus rituales más importantes al principio de tu horario.
La primera hora del día establece el tono para el resto del día, por lo que debes aprovechar este tiempo para hacer lo que consideras más importante.
3. Reconoce la extensión completa de tu horario
Darle seguimiento al tiempo asegura que tengas tiempo para lograr todo lo que deseas durante el día.
Las alarmas son una buena herramienta para asegurarte de tener todo bajo control.
Monitorear tu tiempo y tus actividades puede ayudarte a crear una base que te permita bloquear con precisión ciertas horas o aprovechar mejor otras, en el momento que crees una rutina diaria.
4. Perdónate cuando te saltes la rutina
Las rutinas son importantes para mantenerte en el camino y ser responsable, pero somos humanos. No es necesario que te castigues psicológicamente cuando tienes un mal día.
Si te equivocas en algo, recuerda que siempre hay un mañana y puedes volver a intentarlo. Lo importante es que en el proceso de adaptarte a tu rutina diaria, encuentres la felicidad. La disciplina es liberadora, pero no tiene que ser todo perfecto.
Con información de Well and Good