Universia
Las empresas y las personas deben enfrentarse a un mundo en constante evolución y la capacidad de adaptarse a los desafíos y cambios es más crucial que nunca. La adopción de procesos de transformación digital, la innovación de productos y servicios y la redefinición de modelos de negocio se han convertido en una tarea obligada para las pequeñas y medianas empresas que aspiran a ser competitivas. Por eso, especialmente en el contexto de las profesionales STEM, la adaptabilidad es uno de los mayores activos para un profesional.
Foto: Pexels
Hoy en día, el mercado laboral busca personas que sean capaces de adaptarse rápidamente a las necesidades de los clientes, a las tecnologías cambiantes y los roles inéditos. Por lo tanto, estos trabajadores deben poseer habilidades transversales, combinadas con sólidos conocimientos técnicos. Para triunfar en el ámbito STEAM, de hecho, hay que reunir competencias científicas y matemáticas, herramientas propias de la revolución digital, con las artísticas y humanísticas, ya que el cambio solo puede ser gobernado por los seres humanos.
Entre estas últimas habilidades entran también las conocidas como soft skills, y la adaptabilidad ciertamente juega un papel protagonista. Lo positivo es que la adaptabilidad se puede entrenar.
Qué entendemos por adaptabilidad en profesiones STEAM
Psicológicamente, la adaptabilidad se puede definir como "el proceso mediante el cual un individuo se adapta al entorno físico y social, modificando sus patrones de conducta u operando sobre el propio entorno para transformarlo según sus necesidades". Ser flexibles y saber adaptarse a las evoluciones de nuestro ecosistema es sin duda uno de los secretos para destacar en el mundo laboral, especialmente cuando se trata de contextos que están continuamente sujetos a actualizaciones o cambios como las profesiones STEAM.
Demostrar una buena predisposición a la adaptación en el lugar de trabajo es importante porque las personas flexibles y proactivas tienen un mayor control de las situaciones y cuestiones críticas, cualidades esenciales para superar con éxito los imprevistos diarios sin comprometer el trabajo realizado e identificar soluciones innovadoras que no se habían considerado.
El arte de ser adaptable y flexible se puede aprender a través de la experiencia directa, de la observación de compañeros, amigos y familiares que ya han adquirido esta capacidad y, sobre todo, a través de lo que se llama inteligencia emocional. Desde los años 90, muchos estudios han demostrado que, en términos de resultados, las habilidades comunicativas y personales son mucho más importantes que el cociente intelectual. Además, a diferencia del CI, que permanece sin cambios a lo largo de la vida de un individuo, la inteligencia emocional se puede desarrollar.
La inteligencia, una aliada en la adaptabilidad STEAM
Hay numerosos ejemplos que desvelan cómo el empleado está llamado a adaptarse para hacer frente a los nuevos avances: desde horarios de trabajo flexibles hasta el teletrabajo, pasando por nuevos sistemas de gestión y procedimientos digitalizados que le obligan a mantenerse al día con un mundo en evolución.
Entre los desafíos con mayor impacto en el mundo del trabajo se encuentra sin duda el que representa la inteligencia artificial (IA).
De hecho, algunos temen que la automatización pueda reemplazar a los humanos en muchos roles, pero una mirada más cercana revela una realidad más matizada. Si bien algunos puestos pueden automatizarse, la IA también abre nuevas oportunidades y requiere diferentes habilidades que serán esenciales en el mundo laboral del futuro.
Industrias y servicios como la atención sanitaria, las finanzas, la fabricación y la atención al cliente ya se benefician de la IA. Esta tecnología puede simplificar y optimizar tareas repetitivas, permitiendo a los trabajadores centrarse en actividades de alto valor que requieren creatividad, intuición y habilidades de resolución de problemas típicas y exclusivamente humanas. Esta innovación supone una reestructuración de las capacidades requeridas para el puesto de trabajo y la adaptabilidad se convertirá en un requisito imprescindible.
Así pues, si es cierto que algunas profesiones podrían automatizarse, el trabajo del futuro requerirá sobre todo una colaboración sinérgica entre humanos y máquinas. La inteligencia artificial y las tecnologías asociadas están evolucionando rápidamente, por lo que las personas deberán estar preparadas para actualizar sus conocimientos y habilidades si quieren mantenerse al día con los avances de la industria. Es fundamental prepararse para esta transición invirtiendo en formación y adoptando un enfoque de aprendizaje continuo, lifelong learning, con determinación y mentalidad abierta.
Alvin Toffler era un conocido sociólogo estadounidense, al que le encantaba definirse como un ‘futurólogo’: durante muchos años estudió los medios de comunicación y su impacto en la sociedad y el mundo de la cultura. Parafraseando una de sus frases célebres, podemos decir que 'los analfabetos del futuro no serán los que no conocen las herramientas digitales, sino los que no sabrán aprender, desaprender y reaprender'.
Buscas Trabajo?
Encuentra el trabajo ideal para ti
Artc. de RR. HH., anteriores:
Las siete cualidades que distinguen a un profesional exitoso de uno común
Cómo utilizar la habilidad de negociación para crecer profesionalmente
«Háblame de un error que hayas cometido en el trabajo»: Cómo responder a esta pregunta de la entrevista
¿Tienes un perfil tecnológico y buscas trabajo? Evita estos errores en tu carta de presentación
En tiempos difíciles el consejo de los expertos es a ser proactivo y creativo
Concentración: el poder que construye su vida y su destino
Cómo pedir feedback al reclutador que te ha descartado en un proceso de selección
La Importancia del Fortalecimiento de Competencias Blandas en las Organizaciones
¿Cómo crear afinidad con el entrevistador?
Tips para un currículum programador informático
De quien es la culpa: un análisis de responsabilidades en la sociedad moderna
Director de Finanzas: Funciones, Competencias y Perfil
