Por Belén Claver


Lo primero que tienes que preguntarte, antes de enviar CV como un loco/a es:

1.  ¿Qué trabajo quiero conseguir?

2.  ¿Cuál es mi trabajo ideal?
 

Sin plantearte esto, nada tendrá sentido. Me explico, si te pones como un/a loc@ a escribir tu CV o a rellenar perfiles en internet sólo estarás desperdiciando parte de tu valioso tiempo, es decir, perdiendo el foco en lo que realmente importa, qué es qué quieres (últimamente no paro de repetirlo, es mejor pararse y pensar que ponerse a hacer, cuánto daño ha hecho el just do it…)

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Tienes que trazar un camino con inicio y final.

Para empezar tienes que evaluar lo que tienes, es decir situación actual (inicio):
 

• Empleado o desempleado
• Condiciones actuales (económicas, personales…)
• Conocimientos (formación, experiencia)
• Habilidades desarrolladas (trabajo en equipo, orientación a resultados…
• Tipo de empresa en la que trabajo

Para pasar a la situación deseada (final):

• Trabajo o área de trabajo deseada (qué me hace feliz)
• Conocimientos necesarios para desempeñarla
• Competencias necesarias para su desempeño
• Condiciones económicas y sociales que deseo (salario, ubicación, beneficios…)
• Tipo de empresa en la que me gustaría trabajar

No te olvides de ser realista, mentirse es lo peor que puedes hacerte.


 

¿Qué tipo de objetivo persigues?

Podrías dividir los objetivos de carrera básicamente en dos opciones.

• Un nuevo trabajo en la línea de lo desarrollado anteriormente (en muchos casos las competencias y experiencia son las mismas)
• Un cambio de trabajo con nuevas competencias y conocimientos (formación)

Tanto para uno como para otro tendrás que implementar un plan de acción. En el primer caso para buscar en los sectores desarrollados, en el segundo para desarrollar y adquirir las experiencias y conocimientos deseados. En ambas situaciones la temporalización es una herramienta fundamental, dicho en cristiano, poner fechas a tu plan de acción te ayudará no sólo a conseguir las etapas marcas sino también a ser realista con la consecución de los mismos. Tanto es así, que si te mientes serás el/la primero/a en saberlo.

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Si no tienes un plan, vamos mal.

Qué etapas tiene ese plan:

• Definición de la situación actual y de la situación deseada. Puedes subdividirla en varios apartados
• Puesto que desempeño/Puesto a desempeñar
• Funciones /Funciones a desempeñar (puedes intentar contactar con gente del sector definirlas con mayor precisión)
• Conocimientos que poseo / Formación necesaria para el desempeño
• Habilidades / Habilidades y competencias necesarias para su desempeño
• Salario actual / Salario deseado
• Beneficios salariales actuales / Beneficios salariales deseados
• Ubicación actual del puesto /Ubicación deseada
• Contras del puesto actual / Desventajas del puesto deseado
• Montante económico del que dispongo para los cambios.

Valoración de objetivos.

Para eso tendrás que haberte hecho las preguntas anteriores y valorarlas por orden de prioridad, algunos empleos pueden ser:

• Salario
• Conciliación vida familiar
• Viajes
• Beneficios
• Plan de carrera
• Entorno multinacional…

Sé realista y valora realmente lo que te motiva.


Pasos a dar.

• ¿Cómo? Agenda de tareas (on-line o en papel)
• ¿Qué? Formación que necesito.

                     Listado de cursos y costes

                     Temporalización (plazos y consecución de título u objetivo)

• ¿Qué?   Competencias que necesito.

                     Costes de la capacitación.

                     Temporalización (prácticas, entrenamiento, voluntariado…)

• ¿Cuándo y dónde? Acciones a realizar (contactos, asistencia a seminarios, networking, formación…)
   
• ¿Cúanto? Evaluación semanal de acciones y objetivos (es preferible que te plantees objetivos semanales modestos e ir incrementándolos) es decir, tendrás objetivos a largo plazo (conseguir el puesto o terminar un estudio o carrera superior= y objetivos a corto y medio (por ejemplo, conseguir una certificación, hacer una red de contactos en un sector determinado)
   
• ¿Cuánto? Pagos y gastos
   

Revisar y evaluar.

• Si te has dado cuenta, que los objetivos estaban mal planteados o no eran medibles, tendrás que replantearte la situación. Todos nos podemos equivocar, el problema no es equivocarse, sino no saber en qué pasos o etapas te has equivocado para poder corregirlas.

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